Carnaval 2014

Siberia es un vasto territorio rico en leyendas y costumbres de los pueblos ancestrales, dominado por el frío y la nieve, ocupa la parte Asiática Oriental de Rusia, desde los Montes Urales al este hasta el océano pacífico al oeste.

 

Los pueblos árticos siberianos, creían que un gran espíritu protegía a los animales, encarnaba su esencia y controlaba su adecuado  tratamiento ritual por los humanos. Este ente guardián o propietario de los animales se ocupaba también de evitar o facilitar su caza. Adquiriendo diferentes formas, desde una hermosa mujer ataviada por lujosas prendas, hasta un enorme oso blanco.

 

Cuenta la leyenda que la dama de los animales habita en un castillo de hielo entre las montañas, era amante de los cisnes, a quienes protegía vigilando cuidadosamente su migración. Rondaba los vastos territorios siberianos sobre un gigantesco trineo tirado por perros; su magia le permite estar en varios lugares a la vez y cambiar su aspecto.

 

Un impresionante carro blanco, de magnitudes nunca antes vistas en Pedasí, en el cuál esta antigua leyenda rusa cobra vida. Gigantescas columnas blancas coronadas por relojes que representan las diferentes horas de Siberia Occidental, Central y Oriental sirvieron de marco para que la protectora de los animales árticos, esta noche encarnada en nuestra Hermosa Majestad Yosselyn del Rosario Monteverde Trujillo, hiciese su recorrido triunfal en un impresionante carruaje de hielo tirado por gigantes perros nórdicos. 

 

El impresionante vestido que nos luce S.R.M. Yosselyn 1ra y sus damas es un diseño y confección del habilidoso y reconocido artista Luis Carrasco. El diseño del carro alegórico es obra del Lic. Jaime González. La elaboración de los perros y cisnes estuvo a cargo del escultor Luis (Fili) Pérez. Las tarimas, relojes, columnas y trineo son obra del grupo de trabajo de Calle Abajo de Pedasí. La decoración de las piezas las realizó el Lic. Esteban Chung. Y la confección de los tapaplumas, aparejos, moteado y emplumado estuvo a cargo del Lic. José Córdoba.